21.2.11

Él.

Él es como una frase melódica de una canción que empieza a sonar en mi cabeza a las ocho y doce de la mañana y no se va ni a las cinco menos diez ni a las doce y trece. Él es como un dolor de estómago agradable que hace que suspire entrecortadamente. Él es como una sonrisa constante que no es forzada y no duele. Él es como un regalo diario que alberga treinta y tres sorpresas.
¿Él?
Él está prohibido.

14.2.11

¿San Valentín?

Siempre he dicho que San Valentín era una bobada y que jamás lo celebraría. En el fondo, siempre me he morido de ganas de celebrarlo. Básicamente, soy una clásica.
Querida vida: este año tampoco celebramos San Valentín, lo siento.